Ni esto siquiera sé, que nada sé; lo conjeturo, sin embargo, de mí y de los demás. Sea esta proposición mi bandera; esta se debe seguir: Nada se sabe. Con esas palabras dubitativas comienza la obra del siglo XVIQuodnihilscitur (Que nada se sabe) de Francisco Sánchez “El Escéptico". Un antecedente de la duda sistemática cartesiana, de cuestionar sistemáticamente el mundo como medio de aproximarse a la realidad sin perjuicios. En una sociedad como la nuestra, de certezas impuestas, dudar es revolucionario.

Partiendo de este punto, dos actrices y dos actores repasan diversas visiones de la discapacidad en el teatro clásico, deteniéndose en una adaptación moderna escritura por Manuel Lourenzo de Filoctetes, una de las tragedias griegas de Sófocles, en la que se presenta la idea de la diferencia, de la persona discriminada, diferente, que la sociedad no sabe (o no desea) incluir. Desde el suyo propio punto de vista, el elenco resignifica esos textos desde esa diversidad, advirtiendo al público y a la sociedad de que Nada se Sabe sobre lo que las personas con discapacidad son, piensan, sienten, quieren, y de la posición que desean ocupar en la vida, en la sociedad y en el arte.

Elenco: Corina Alfonso Mañá, Rubén Bargiela Sierpes, Alba Chao García, Elvis García Torres

Dirección: Ignacio García, Fran Rei

Adaptación a Lengua de Signos y participación actoral: Chusa Pérez de Vallejo